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¡Lo que se hace llevado por la curiosidad! Sólo es comparable a lo que se hace llevado por la salidez.... Ambas te conducen en volandas where no man has gone before.
Así, por ejemplo, me he hecho seguidor de mí mismo, para poder entrar en friends connect y poder mandarle un mail a mi seguidor número 49, Avedeborges, que ha aparecido de pronto como traido por esos vientos (bueno, sólo por la curiosidad, que uno ya no está para ser objeto de deseo) o tal vez por las olas de surfero web (que es un despistado que iba a mirar cómo se dice "calima" en indi, y acabó leyendo cosas sobre las islas del pacífico, el nuevo catálogo on-line de Ikea o cómo recalentar un codillo - en respuestas Yahoo).
Lo que puedo hacer, para no falsear los datos, es seguir mi blog con desdoblamiento de la personalidad. Que sea mi parte seria la que lee los chistes tontos que incluyo, y mi parte descreida la que asiste a la exposición de mis ideales. Aunque sospecho que acabaré por borrarme como seguidor, porque nunca me he llevado bien conmigo mismo.
Eso sí, la salidez a veces me lleva al encuentro de mi propio yo, o al menos de una parte de yo.
(Bienvenido/a, avedeborges. Cenicienta en vez de perder un zapato de cristal dejó en las escaleras un par de Prada)
Hace 1 día
Salidez. Bonito palabro... y más si te lleva to places where no one has been before... That's interesting!
ResponderEliminarEl par de Padra... ¿me lo puedo quedar yo?
Besos.
ya me borré como seguidor de mí mismo. Me parecía un poco excesivo ya... : )
ResponderEliminarSalidez: salacidad,lujuria,deseo desmedido, desmesura sexual. Y sí, es un palabro derivado de "salido"
Y con asombro y admiración encuentro que estás el primero en Google si buscas "recalentar un codillo", pero como es por este mismo post, pues me quedo sin saber cómo recalentarlo, que siempre se me quedan resecos. Recurriremos a Rodilla :-P
ResponderEliminarYo quité hace mucho lo de los seguidores porque no consigo entender a los que se te apuntan y jamás (pero jamás, ni siquiera el día que se apuntan) dejan un comentario. Si se me hubiera ocurrido autoseguirme (palabro?) seguro que el dios de los blogs me habría castigado a permanecer en un eterno onanismo blguero. Que me conoce muy bien.
Un abrazo.
Hola, Teodoro. Hay varias formas de recalentar un codillo. Desgraciadamente ninguna de ellas garantiza que se le quite ese sabor a codillo recalentado o a codillo requemado (si lo que pretendes es emular a Ferran Adriá con el soplete). El sandwich de rodilla es siempre una opción. Creo, por cierto, que tienen uno nuevo de codillo recalentado con tropezones que sabe exactamente igual que todos los anteriores.
ResponderEliminarY lo malo del onanismo bloguero es que según fuentes eclesiásticas puede dejarte ciego.
Un abrazo, : )
Lady, los tacones rojos me los pides a mi y son tuyos diva!
ResponderEliminarGracias Rafa,
copiado
;)
Pues tengo que decirte, Rafarrojas querido, que, como buena ególatra que soy, soy seguidora de mi blog. Así que, Theodore, no me importa que el dios de los blogs me castigue por mi onanismo (ni por el bloguero ni por el carnal). Y de ahí, directa a la parte chachi del infierno, la de las fiestas Prada, Gucci, Dior y Jimmy Choo.
ResponderEliminarMi Irene insurgente y querida, gracias por los tacones. En febrero nos los ponemos y quemamos la noche. Sí o sí. Because we worth it!
Besos para tod@s.
Es muestra de la matemática del sexo que 1 + 1 sea igual a 69. De lo que se deduce que el sexo no es ciencia exacta, sino inexacto arte.
ResponderEliminarY no sé por qué me ha venido esto a la cabeza, así, de pronto, jajajaja
Cenicienta no deja ahora tacones sino comentario en el blog, y será harto difícil la tarea de ir de puerta en puerta por el reino probando comentarios a todas las mujeres.
"De lo que se deduce que el sexo no es ciencia exacta, sino inexacto arte." Me-en-can-ta. Lo sepas. Sobre lo de Cenicienta, nada que decir, no sea que no me toque darme por aludida... ;)
ResponderEliminarEs que los sapos últimamente destiñen que no veas
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