13 de diciembre de 2010

De mi amiga India Ning, de su blog http://noolvideselpoemadelapagina112.blogspot.com/

Vale, esto propone India Ning en su blog y yo lo he cogido por si no conocéis el blog. Mis respuestas van incluidas:

En la prestigiosa universidad de Pringwall, Masachussets, exigen como único requisito para formar parte de su selecto alumnado, pasar un test que elaboró minuciosamente el Dr. Francis G. Weimberg para ellos: El Tester-Ten Twingo. También llamado TTT.
Investigando sobre éste me ha sorprendido –y no gratamente- que así mismo sea utilizado en España para cuerpos estatales de riesgo, tales como guardaespaldas, jardineros, cocineros reales, ujieres y técnicos de alumbrado navideño.
Aparentemente son diez absurdas preguntas, que contestadas con honestidad y espontáneamente, arrojan –una vez analizadas por un experto psicoanalista- el verdadero arquetipo de persona a la que nos enfrentamos.
Les ruego dejen sus respuestas para poder llevar a cabo una limpieza en mi blog y sobre todo poder averiguar si en el caso de, serían ustedes válidos candidatos a una beca en la facultad de Pringwall, Ohio.
1.- ¿Cómo decora su casa en Navidad?

1. Con música.
…….
2.- Llega a una rotonda de 4 entradas y en cada una de ellas están al volante: Rouco Varela, Belén Esteban, la Duquesa de Alba y Falete. ¿En qué orden deben pasar?

2. ¡ésa la sé, ésa la sé!.... No, se me ha ido.... ¿Yo?
…….
3.- ¿Cuál es su turrón preferido?

3. el de chocolate Suchard, pero dónde esté un buen solomillo...!
…….
4.- Son las 2 de la mañana y no puede dormir ¿qué hace?
4. nunca estoy en la cama a esa hora porque hay tanto que hacer y no lo he hecho el resto del día y ahora si me fuera a la cama me revolvería de remordimientos y tal vez de gases, porque es lo que tienen los cocidos como cena, que dejan insomne a voces.
…….
5.- ¿Cuál es su palabrota preferida?
5. Me cago en Satanás. (la Asociación Nacional correspondiente certifica que ningún satanás ha sufrido en la realización de este insulto)
…….
6.- Su casa se incendia y sólo puede recuperar una cosa ¿cuál?
6. Mi vida (incluye, por supuesto, la de mi mujer y mis hijos, y al perro... el gato que se busque la vida, ¿no es tan independiente?) Si ya he salvado todo lo anterior, el disco duro externo, con mi otra vida.
…….
7.- Termine esta serie: 2345 – 457689 – 12 – 337733 - ¿?
7. Lo hice. Me cogió una señora que dijo que allí no había ningún Alfredo y que a ver si dejábamos de llamar, coño (el coño lo dijo ella, no yo. Yo habría dicho Me cago en Satanás, que es insulto certificado, pero coño no)
…….
8.- Está esperando un ascensor en la planta 23. Se abren dos a la vez. En uno baja una tía/tío despampanante; en el otro un neonazi con tres doberman ¿en cuál entra?
8. Si ya se han bajado, no me preocupa la compañía.... ¿A dónde va la maciza? ¿merece la pena seguirla y olvidarse de subir?
…….
9.- Está en una casa de invitado. Va al lavabo por un apretón. Caga y no hay papel. ¿Qué hace?
9. Tras comentar en voz alta de forma educada y cordial mi situación a nadie en particular "¡Me cago en Satanás!", me limpio con el calzoncillo, que dejo en la papelera, y salgo del lugar en plan comando.
…….
10.- Su pareja, a la que ama profundamente, le envía un sms con el mensaje: Tenemos que hablar. ¿Qué piensa?


10. Me cago en Sat.... Digo yo que habrá que hacerlo.


Recomiendo leer las respuestas que han dado el resto de los amigos de India Ning, que tienen gracia.

8 comentarios:

  1. 1. No suelo decorar mi casa, soy así de vaga. Pero este año sí lo he hecho: he puesto un árbol con bolas doradas y rojas de purpurina.

    2. Ah, pero ¿todos estos conducen? Me parece que al final paso de sacarme el carné.

    3. El turrón de Jijona.

    4. Si tengo maría, fumo. Si no, me pongo a Punset.

    5. Hostia puta. Sólo para casos de extrema ira.

    6. Mi cámara de fotos.

    7. Yo es que soy de letras.

    8. ¿Pero qué clase de pregunta es ésa? ¿No es obvio que en la del/la macizo/a?

    9. Teniendo en cuenta que es una casa particular y no un bar, imagino que tendrán ducha o bañera junto al wáter, así que pondría en culo bajo el chorro y hala.

    10. Él nunca diría eso. Diría: vamos a tomar un café.

    ResponderEliminar
  2. Jajaja! A la SGAE vas :) Te dejo mis respuestas aunque ya las conoces:

    1.- Soy tan vaga que cuando acaban las fiestas dejo el árbol en el trastero, montado, así el próximo año ya lo tengo hecho.
    2.- Es una situación improbable, ya que me temo que ninguno de los 4 conduce.
    3.- Ninguno, prefiero lo salado.
    4.- Hablar con Loka o jugar al cruzapalabras en el Juegón.
    5.- Joder
    6.- El portátil y toda la información confidencial que tengo en él: fotos de Jardi y Loka comprometidas, cartas de amor de Groucho, videos porno de Franc, desnudos de Onallera, etc.
    7.- Nunca termino lo que empiezo. Todo me cansa y aburre con facilidad.
    8.- No me gusta estar en espacios cerrados y pequeños con desconocidos, estén lo buenos que estén, así que espero un ascensor vacío.
    9.- Jamás cago en lavabo ajeno, a no ser el demi madre o hermanas, o sea, que si el váter no es sangre de mi sangre, nada.
    10.- Que duraba demasiado.

    Jajaja! Qué ilusión ver mi post aquí. Gracias y un besazo!

    ResponderEliminar
  3. Pues para ujier no sé, pero te veo un gran futuro como técnico de alumbrado navideño ;)

    ResponderEliminar
  4. ¡Pedazo de blog! Un gusto haberlo conocido. Me hago tu seguidora. Una no sabe que leer primero. me quedo por aqui con tu permiso, y de paso te invito a conocer los mios. Será un lujo verte por alli.
    Un abrazo desde Ciudad de Buenos Aires

    ResponderEliminar
  5. Hermosa decoración navideña, el calzoncillo que dejó en el baño amojonado. Poco tiempo después se excusa con los anfitriones antes de que se den cuenta del pastel marrón (que recuerda al turrón Suchard, pero con tropezones más grandes), y huye como si la casa estuviera en llamas (se ha hablado mucho del metano como productor de llamas amarillas y verdes y al menos un cuarto de ese hogar registra ahora peligrosos índices de concentración). Escapa rápido, llevándose sólo su persona (ya les deja representación suficiente de ella), y justo a tiempo, que mientras está en el descansillo ya puede oir a los de la casa jurar en arameo "joder, coño, hideputa!" (habrán descubierto el regalo que les ha dejado y se habrán planteado la necesidad de reponer las existencias de "Elefante", que resbala pero hace el avío). En los ascensores deja pasar a un neo-nazi que va con sus dos perros y, como no hay confianza, no aconseja a los perros lo que se le pasa por la cabeza: "no os comáis al gilipollas, aunque os dé ganas, que tiene el cerebro podrido y os sentará mal". Pobrecitos: ¡qué buenos perros si no tuvieran por amo una rata! Como premio a su espera, llega otro ascensor con semejante pibonazo.... "¿Subes?... Ah, yo también". Al cielo, si hay suerte. Enseguida a apoyarse en todos los botones del ascensor con memoria. "Uy, qué tonto soy, ¿pues no le he dado a todos los pisos?". Tiene 27 paradas para conseguir pasar de hablar del frío que hace a comentar de pasada formas de entrar en calor y pedirle el número de teléfono. No se lo da, por supuesto. Yo no se lo daría al que me ha tenido esperando media hora para subir 27 pisos... pero hay que intentarlo, no?, cosas más raras veredes. Luego rápido a casa, sin apenas pararse en minucias como semáforos y rotondas, y es propio de su condición de persona discreta que no atienda a los afanes ajenos, como los de esas personas que chocan sin poderlo evitar a su paso. "Yo a tí te conozco: ¿no nos hemos visto en un programa de la tele?". Apenas puede concentrarse, por otra parte, porque el apretón de la casa de sus anteriormente amigos era sólo prólogo de lo que ahora se revuelve como alien en su barriga. Intenta realizar complicadas operaciones aritméticas para distraer el cerebro mientras con mano temblona abre la puerta de su propia casa: "2345 – 457689 – 12 – 337733 - ..." ¡Ah, por fin abierta! (Bueno, nunca lo hubiera resuelto de todas formas) Directo al baño. "No puedo, no puedo..." le dice a su pareja que está en la puerta con la pregunta "¿de dónde vienes a esta hora?", tatuada en su hermoso rostro en colores rojo-bermellón, rojo-colérico. Por fin, su trono, regio asiento dotado de todas las comodidades incluido papel de tres capas. Mientras bufa, y suspira, y se retuerce, suena el móvil. Es su mujer, desde el otro lado de la puerta. "Tenemos que hablar"...
    A voz en grito, responde "Sí, mi amor, dame un minuto...gggg... que sean cinco".
    Hola, India. Hola, Pilar. Hola, Pecosa. Hola, S. Hola, Toro. Hola, Susana Inés Picolini.
    A esta última, bienvenida a tu casa (donde siempre hay papel para un apuro o para escribir tus memorias).

    : )

    ResponderEliminar
  6. Qué grande, rafarrojas. Me ha encantado.

    ResponderEliminar

Bienvenida sea la libre expresión de ideas... Ahora bien, no necesariamente lo que digas será compartido por mí, ni lo daré por cierto, válido o bueno.
Sin embargo, qué gusto tener gente que acude a mi convocatoria (soy muy simple)