11 de noviembre de 2010

Parecidos razonables II y a los 100 años todos calvos


La madre de "Alias" y la madre de "Chuck" se parecen.
Para los que no vean la tele, como mis amigos Luis y Mario (que a cambio saben cómo es el mundo real):
- Alias (Jennifer Gardner) es una jovencita maciza reclutada para ser espía y que se pasa el día llorando o dando leches de kung-fú.
- Chuck es un nerd, un empollón, reconvertido en espía por haber asimilado en su cerebro la información secreta de un superordenador y que se pasa el día sonriendo o dando leches de kung-fú.
Resumiendo: Alias-llorona vs Chuck-sonrisas. Ambos, kung-fu. Tragedia la primera (aunque poco creible) frente a comedia la segunda (un poco tipo payaso).
Cuando pasa la primera temporada, y la segunda, y la tercera... hay que renovarse o morir. Se buscan nuevos personajes que vienen a ponerle nueva cara al show viejo, y en algunos casos permiten desarrollar detalles del personaje protagonista o darle un giro al guión.
En ambas series, aparecen las madres de los protas. Tienen en común estos nuevos añadidos maternales que son espías, las dos. De galgo le viene a la casta, o viceversa (it runs in the family). Abandonaron respectivamente a Alias y Chuck, y de paso eso explica porqué no habían aparecido antes en las temporadas pasadas. Ergo, no son muy fiables. Han dejado una herida en los chicos, a poco que escarbe el guionista, dentro de ese típico hilo argumental tan yanki de "¡yo quería tener una madre, pero tú no viniste a mis partidos de beisboll ni a mi función de ballet del cole!", reproches eternos. Y, claro, al no tener supervisión fueron a lo de beisboll con el tutú y a la función con el bate, todo equivocado, pero es que los niños necesitan que se les vigile cuando hacen las mochilas, ya se sabe, que si no siempre se les olvida algo. Un españolito no tendría problemas si su padre no va a verle jugar, si le da pasta (aunq cada vez nos parecemos más con los del otro lado del Atlántico, y en tó lo malo).
A la queja de la progenie la madre (de Alias y/o de Chuck) contesta, y la puedes creer o no, "nada me hubiera gustado más, pero...." y también "no sabes lo mucho que me arrepiento". Igualmente podría haber dicho "es que ese día tenía gripe", pero no. Y como encima son espías, pero del Lado Oscuro, de los Otros, de los Malos, de la KGB o incluso peor, de alguna organización ultrasupersecreta y que aspira a dominar el mundo, pero no está bien que aspire a dominar el mundo la iniciativa privada que para villanos ya tenemos los que produce el sector público que para eso está y si no mira a Bush, a Putin, a Berlusconi y semejantes, para que encima venga el malvado de turno con gato persa en el regazo tipo Doctor No o MiniYo o Volkoff, y no tenemos referencias ninguna de ellos, y no sabemos si tienen el Master en Villanía homologado o no, o si el Curso que hicieron en Maquinas del Juicio Final y Armagedones Amenazantes tiene todas las horas lectivas que deberían...... como son de los Malos, digo, las madres, pues más razones para no acabar de fiarse y más razones tb para el conflicto, que Chuck y Alias están, por supuesto, del lado de los Angeles (en Joyibú, Hollywood, para más señas)
No me enrrollaré (ya lo he hecho)
Aunque un último detallito: en el capítulo 7 temporada 4 de "Chuck", por cierto, hay un guiño a "Alias", cuando un Timothy Dalton que hizo de 007 y aquí hace de contacto del Mi5 dice que le encanta esa serie. Y se parecen en los rasgos, creo. Os dejo una foto para que juzguéis vosotros mismos.
Bueno, pues aquí tenemos a la sueca Lena Olin (que se casó con el director de cine Lasse Hälstrom, el de Mi vida como un perro y Chocolat) y por el otro a Linda Hamilton (que se casó con James Cameron, el de mil y una películas, y la mayoría de ciencia ficción, y las de Terminator con ella). Es el tipo de coincidencias chorra que no van a ninguna parte, ni hacen patrón, pero siguen llmándome la atención.
Y a estas alturas Linda Hamilton se parece más a Lena Olin que a aquella Sara Connor de los primeros Terminator. Como acaban pareciéndose todos los realmente gordos, obesos, tales chinos de rasgados ojos de los que dicen que hay 900 millones y todos parecidos. Que vamos pa' viejos y los viejos se parecen todos en la sonrisa (la falta de ella), en el cabello (la falta de él), el sentido del humor ( - )...
A los cien años incluso yo me pareceré a Lena Olin.

2 comentarios:

  1. Pero qué dicessssss!A mi me gustaba Alias,bueno vale me gustaba el muchachito ese que siempre intentaba hablar con ella,que era tan bueno,tan guapo,tan dulce y que estaría castrado porque hay que ver que nunca le metía mano a la muchacha!
    Eso sí,para mi Sarah connor es Sara Connor,aunque luego esta actriz no ha destacado en nada más,aunque claro,estar casada con uno de los grandes y forrados de Holybu,para qué quiere trabajar tanto,ni que fuera funcionaria.
    Ya me callo,es un placer andar por aquí.
    Volveré(y te lo digo en plan terminator,así que te cueles)

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  2. Teniendo cuenta como era Alias, el muchachito acabó palmando, o era de los malos y disimulaba e igualmente acabó palmando. Y Alias aderezaría el dramón con gordas lágrimas (no hizo de "Electra" por casualidad, porque tiene rasgos de griega clásica y de plañidera y se le da bien el lloro amargo).
    Y a mí me gustó Linda Hamilton en una peli de un tema que siempre me ha entusiasmado, las vidas alternativas, de un tal Orr, "Un destino de ida y vuelta" haciendo de mujer de James Belushi, con Michael Caine y Renne Russo.
    Y no te calles nunca, es un placer tenerte por aquí.
    Vuelve, y serás recibido como el segundo Terminator por John Connors, al final de la peli.

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